Si has pensado viajar a Portugal y poner en practica tus conocimientos en portugués, no puedes perder de vista la capital portuguesa, la cual es una de las ciudades del país más grandes, pobladas y sobre todo más visitadas por turistas extranjeros anualmente. Posiblemente tengas de forma repetitiva en tu mente ¿Qué hacer en tu primer viaje a Lisboa?
Portugal es el país madre del portugués, en el podrás valorar el acento más propio, además de visitar las principales locaciones históricas y culturales de Europa, donde se logra integrar a la perfección los más antiguos puntos históricos con el mundo moderno.
Viaje a Lisboa una experiencia de idiomas que recordaras de por vida.
Lisboa se encuentra ubicada al oeste de Portugal, hacia la costa del océano Atlántico, específicamente en la desembocadura del Rio Tajo. Cuenta con una población de más de 540 mil habitantes lo que sería más del 25% de la población del país.
La ciudad es una de las capitales más cálidas de toda Europa. Parte de esto es lo que influye en la gran visita anual que recibe por parte de europeos que huyen de los fuertes inviernos en sus países de origen.
En la primavera es generalmente soleada con agradables temperaturas de 16 a 28°C. En otoño e invierno se caracteriza por sus días lluviosos y soleados. Así que según la fecha del año en que pienses visitarle te recomendamos planificar las prendas de vestir más adecuadas.
La capital es tan amplia y ofrece tantas cosas, que lo mejor es organizar tu viaje en relación al tiempo de permanencia y así lograr disfrutar de la mayor cantidad de locaciones posibles. Entre los puntos de interés se destacan:
- El Castillo de San Jorge o Castelo de São Jorge
Es la estructura historia más importante de la ciudad, ofrece una vista panorámica incomparable. Se encuentra ubicada en lo más alto de la colina en el centro histórico. El recinto del castillo cuenta con aproximadamente 6000 m². La edificación consta de varias torres y garitas, un foso y dos patios grandes. No pierdas la oportunidad de visitar su museo donde puedes conocer más detalles de su historia, lo puedes encontrar ubicado en el antiguo palacio.
- Elevador de Santa Justa
Otra de las estructuras históricas de la ciudad es el elevador de santa justa, el cual es un ascensor neogótico de hierro forjado. Se encuentra ubicado en una callecita del corazón comercial de Lisboa y es una de las piezas de arquitectura más interesantes que ver. Históricamente se empleaba para trasladar objetos y personas del punto más bajo al más alto de la ciudad.
- Torre de Belem
Construida a inicios del siglo XVI es una de las estructuras emblemáticas de tipo defensivas que aún se conservan en la ciudad. es una joya arquitectónica que incluso ha sido nombrado patrimonio Unesco de la humanidad. tiene 5 pisos, hermosos pasillos y terrazas con vistas incomparables del Rio Tajo y de la ciudad.
4. Barrio de Alfama Y Barrio de La Baixa
El Barrio de Alfama es el más antiguo de la ciudad, paseando en sus calles encontraras iglesias hermosas, agradables cafeterías y personas muy amables acostumbras a recibir con atenciones al turista. Si acudes en el mes de junio no pierdas la oportunidad de acercarte a sus fiestas patronales de San Antonio
El Barrio de La Baixa, es el barrio perfecto para perderte entre sus calles, en el puedes encontrar la hermosa plaza de los restauradores, la plaza del Rossio, la Plaza del Marqués de Pombal y La Plaza del Comercio.
- El Parque de las Naciones
A diferencia de las locaciones antes mencionadas, el parque de las naciones situado al este de Lisboa, es el claro ejemplo de la arquitectura moderna contemporánea. Cuenta con la Oceanaria de Lisboa, que es uno de los acuarios más hermosos y grandes de toda Europa. En él se pueden apreciar mas de 450 especies de diferentes animales marinos. Es ideal para visitar si has viajado en un plan familiar con niños.
Además de visitar estas hermosas locaciones no olvides de aprovechar tu viaje para comer los más deliciosos platos típicos que solo en Lisboa encontraras, la ciudad ofrece una variedad de suculentos platos a base de pescados y mariscos como las sardinas asadas, el Bacalao à Bras, las croquetas de bacalao y de postre el famosos Pastel de Belem.