La ciudad de Milán o como se dice en italiano Milano, es la capital económica y comercial del país, además de ser una de las ciudades metropolitanas más importantes de Europa, se encuentra en el norte de Italia y es uno de los puntos turísticos más buscados. Si estas aprendiendo italiano y planeas visitar Italia, no pierdas la oportunidad de visitar esta hermosa metrópoli.
Milán es la capital de la región de Lombardía y aunque es una de las ciudades más grandes del país, la mayoría de sus lugares turísticos se encuentran cerca uno del otro, en el centro de la ciudad, por lo que sí es de tu interés conocerla no será complicado, sin grandes desplazamientos podrás disfrutar de las actividades y entretenimientos que ofrece esta hermosa ciudad.
Milán, todo lo que necesitas saber para visitar la ciudad de la moda
A continuación, hemos realizado una selección de los mejores lugares para visitar en Milán, en nuestra lista hemos incluido los lugares que destacan ya sea por algún aspecto histórico, comercial o paisajístico ¡Empecemos!
Plaza del Duomo Y Catedral de Milán
La Catedral de Milán o el Duomo, es uno de los templos católicos de estilo gótico más importantes del país, destaca por su imponente fachada de mármol n colores claros, su hermosa terraza y esculturas imposibles de olvidar. En su interior no pierdas de ver la estatua del Apóstol Bartolomé y subir a la terraza para que puedes tener una de las mejores vistas de toda la ciudad
Frente a la catedral también veras la Plaza del Duomo, la cual justamente marca el centro geográfico de la ciudad, cuenta con unos 17000 m² de superficie donde están algunos de las estructuras más importantes de la ciudad.
Teatro de La Scala
Si eres un amante de las artes dramáticas, no pierdas la oportunidad de visitar el histórico teatro de la Scala, uno de los teatros de ópera más hermosos y famosos de toda Europa. en él han cantado famosos como placido domingo y Pavarotti, además cuenta con uno de los museos relacionados al teatro más impresionantes del mundo, se exponen fotos y artículos relacionados a la historia de la ópera y el teatro de todas las generaciones.
Iglesia Santa María delle Grazie
También en el centro de la ciudad a pocos metros de la plaza Duomo puedes visitar la iglesia de Santa María delle Grazie, la cual además de ser un hermoso templo religioso expone una de las obras más importantes del famoso Pintor Leonardo Da Vinci, la cual esta titulada la última cena, lo que en italiano sería algo como Il cenacolo o L’ultima cena, una pintura mural que es considerada por expertos como una de las mejores obras pictóricas del mundo.
Palacio real de Milán
El Palacio Real de Milán o en italiano Palazzo Reale, es una de las estructuras históricas más importantes de la ciudad, anteriormente era la sede principal del gobierno de la ciudad, actualmente cumple funciones de museo y centro cultural. En él se exponen obras relacionadas a la era napoleónica y la era neoclásica principalmente.
Castillo Sforzesco
El Castillo Sforzesco, otro imperdible del centro de la ciudad, es un castillo que refleja el esplendor de la época de la familia Sforza. En su interior se aprecian más de 10 museos de arte antiguo, muebles, cultura egipcia y mucho más. Además, cuenta con 2 bibliotecas impresionantes con obras de gran valor literario. No pierdas la oportunidad de ver en este castillo lo que sería la última obra de escultura del famoso Miguel Ángel que quedó inconclusa.
Museo nacional de ciencia y tecnología Leonardo Da Vinci
Aunque mayormente conocido por sus famosas obras de arte, el italiano Leonardo Da Vinci, fue mucho más que un genio, y este museo nacional de ciencia que lleva su nombre trata de reconocer su amplio trabajo sobre todo en lo que respecta sus inventos científicos. En este lugar se pueden valorar los planos, dibujos y bocetos que terminarían siendo piezas invaluables que contribuyeron a la creación de las bases de la tecnología moderna.
Otros de los lugares que deberías ver en Milán son: el Barrio de Brera, la Galería Vittorio Emanuele II, el Barrio Navigli, el Cementerio Monumental de Milán, el Parque Sempione, el Quadrilátero de Oro y la Basílica de san Ambrosio.
